
Transparencia Venezuela actualizó el inventario de casos de Gran Corrupción registrados en su herramienta interactiva, Corruptómetro. El nuevo reporte de la organización contabilizó el dinero público desviado de 153 obras incompletas o no iniciadas, pese a que los recursos fueron desembolsados, totalizando un monto superior a 316.000 millones de dólares perdidos en medio de la malversación, la opacidad y la ausencia rendición de cuentas. Esa cifra, según Transparencia Venezuela, representa 7 veces el producto Interior Bruto (PIB) de 2021 de Venezuela, aun cuando no incluye todas las obras detectadas, las cuales ascienden a 246.
“Son obras aprobadas desde el Ejecutivo nacional que no han sido culminadas y/o no se iniciaron, pero les fue aprobado y/o desembolsado recursos. Muchas de ellas se encuentran en total estado de abandono, son infraestructuras perdidas y desmanteladas. Hay desde hospitales, de los que solo se evidencia una valla; escuelas que se iban a rehabilitar pero terminaron en peores condiciones, y conjuntos residenciales que solo tienen unas bases puestas, hasta grandes obras de infraestructura que abarcarían varios estados del país, como el Sistema Ferroviario Nacional.”, detalla el informe que está disponible en su sitio web.
En su índice de transparencia de 2022, la organización afirma que sólo Sudán del Sur, Siria y Somalia superan en corrupción a Venezuela, lo cual es una clave para entender su emergencia humanitaria compleja, cuyo indicador internacional más elocuente es la salida de casi 7.5 millones de personas del país, lo que responde en buena medida a problemas graves sobre el sistema de salud, agua, electricidad, educación, transporte, vivienda y otros servicios básicos. En esto el informe es categórico: “la crisis económica y social (…) ha profundizado la decadencia de los bienes y los servicios públicos (agua, electricidad transporte, educación, vialidad, seguridad, entre otros), y no por falta de inversión sino por la malversación de los recursos que refleja el presente informe, al visibilizar la gran cantidad de obras sin culminar que finalmente afectan la calidad de vida y el bienestar de todos los venezolanos”.
La actualización presentada por Transparencia Venezuela coincide con el último escándalo de corrupción de PDVSA. Como parte de esa trama de corrupción impulsada por el propio gobierno, se sumó el empresario colombiano Álvaro Pulido, conocido por ser socio de Álex Saab, quien fue detenido en Venezuela el 11 de abril según informó CNN. Ya el 28 de marzo el fiscal general impuesto Tarek William Saab había confirmado que se estaba investigando a Pulido en varios negocios, allanándole algunas de sus propiedades. Días después, el 12 de abril, Saab reveló que fueron “solicitadas 67 órdenes de aprehensión, 55 detenciones ejecutadas, faltando 12 personas por aprehender, y 142 allanamientos hechos a nivel nacional”.
De acuerdo con investigaciones de Estados Unidos, Saab y Pulido habrían transferido presuntamente $350 millones fuera de Venezuela a cuentas extranjeras de su propiedad o que controlaban[1]. Según informe confidencial al que tuvo acceso el portal de investigación Armando.info, existe “un impago a Pdvsa de alrededor de 1.500 millones de dólares asociado a 19 de las compañías controladas entre 2019 y 2020 por Alex Saab Morán y Álvaro Pulido Varga”. Llama la atención que con la captura de Pulido, el gobierno venezolano siga defendiendo a Saab y usando su nombre como chantaje en las negociaciones en México. Esto revela que al gobierno no le interesa la corrupción, y parece que la negociación tampoco.
Además, estas detenciones de funcionarios públicos confirman que se trata de una purga en el gobierno, por conflictos entre Nicolás Maduro y Tarek El Aissami. Es tanto que gran parte de los aprehendidos son funcionarios cercanos al ex ministro de Petróleo. Todavía no se ha adoptado ninguna medida estructural para detener y revertir no la corrupción, sino la emergencia humanitaria compleja. Más detenciones no sirven para esconder la crisis.
Es importante que la comunidad internacional ponga en evidencia que las cifras que se manejan en este entramado de corrupción demuestran que la corrupción y no las sanciones son la principal causa de la emergencia humanitaria, por lo que la principal responsabilidad por la situación del país, incluyendo la pérdida de vidas, recae en quienes detentan el poder.
[1] https://elestimulo.com/venezuela/2023-04-12/detienen-alvaro-pulido-uno-de-los-principales-socios-de-alex-saab/